Estaban tres perros tomando el sol mientras conversaban.
Dijo el primer perro con aire soñador:
”Verdaderamente es maravilloso vivir en estos tiempos en que reinan los perros. Miren con que facilidad viajamos por tierra, por mar y hasta por cielo. Piensen por un momento en todo lo que se ha inventado para nuestra comodidad, para nuestros ojos, oídos y narices.”
Y añadió el segundo perro:
“Ahora entendemos mejor el arte y ladramos a la Luna con más ritmo que nuestros antepasados. Y cuando nos miramos en el agua vemos nuestros rostros con más claridad que los de antaño.”
Entonces consideró el tercero:
“Pues a mi, lo que más me interesa y entretiene mi mente es la pacifica comprensión que existe entre los diferentes estados caninos.”
En ese momento vieron que se acercaba el lacero de la perrera.
Los tres perros salieron a escape y se perdieron calle abajo. Mientras corrían, el tercer perro iba diciendo:
“¡Corran, por Dios y por nuestras vidas, corran! ¡Que nos persigue la civilización!
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